Christmas lights

Alvaro sale presuroso de su casa, es la primera vez que va en una cita; bueno después de todo es no es una cita, es un intercambio de regalos. Es la primera vez que sale con una chica, nunca antes lo ha hecho, esta nervioso, sudoroso, se siente volar y siente un escalofrío en la espalda. Mientras toma el autobús recuerda como logro que Adriana, acepte su invitación, según lo que le han dicho sus amigos ella es bastante sarcástica y casi nunca sale con chicos. Alvaro a agrego como amiga y le dijo hola, ella en seguida respondió hola! quien eres?,  Alvaro responde diciendo, acaso es habitual que tus cabellos se enreden en el saco de alguien. Adriana ya no tiene mas dudas sobre quien es este nuevo amigo, ambos tuvieron la oportunidad de bailar mientras en una voltereta el cabello de Adriana quedo enredado en los botones del saco de Alvaro. Eso ha pasado hace poco, quizás 3 o 4 días, Alvaro no resistía mas, quería saber de ella, quería hablar con ella, quería de todo con ella. Por otra parte, Adriana se sentía igual, pero multiplicado por cien veces, ella estaba enamorada de el desde que el llego al colegio, osea desde el principio del año. Hablan sobre sus presentes navideños, a ninguno le regalaran algo, Alvaro le propone que ambos se regalen cosas, ella muerta de emoción acepta. Alvaro se conecta de donde pueda para hablar con ella, así transcurrieron los días hasta hoy.

Alvaro no sabe que hacer, llega media hora antes al lugar pactado. Suda, palpita, y respira rápidamente, es la primera cita que tiene en su vida. Cuando llega Adriana, ella esta con su amiga, el la mira desde el tercer piso, esta radiante. Viste converse, jeans, y un suéter marrón; es un año mayor que Alvaro, es ahora o nunca, ella se ira pronto tiene que hacer su jugada.  Alvaro de un salto va donde ella, saluda a su ingrata acompañante y ella se va, se queda por fin solo con Adriana.

Hablan, se ríen, y sueñan ella quiere decirle tantas cosas, pero no lo hace. Alvaro esta nervioso, y cuando lo esta se le da por molestar a la gente, para su desgracia la única cerca es ella, Alvaro comienza a fijarse en sus defectos, y los exagera eso siempre hace que las demás persona pierdan la cabeza. En efecto lo esta logrando, ella inconteniblemente se esta riendo, esta funcionando.
Alvaro compra una botella de agua, mientras Adriana se pregunta para que lo ha hecho, Alvaro hace el ademán de tomar un poco, mientras Adriana deja de prestarle atención, súbitamente Alvaro coge un poco de agua y se lo tira directo a la cara, Adriana no se lo esperaba, ella atónita y Alvaro estallando en un carcajada, ella molesta y alegre, la verdad la primera cita de ambos esta saliendo increíblemente bien, el viento comienza a susurrarle al oido de Alvaro que le diga lo que siente, pero este no se atreve, es muy apresurado, deberia llevarlo con calma, lamentablemente Alvaro si se escucha y no hace movimiento alguno, solo la habitual sonrisa y la acostumbrada joda.

El cielo comienza a oscurecerse, ambos pierden la noción del tiempo, ya es algo tarde, Adriana se da cuenta que el tiempo h a pasado volando, le entrega una cajita negra y Alvaro le entrega el diario que compro para ella, mientras apresuradamente ella se despide, y toma un taxi, le dice su dirección, y se va. Alvaro, sabe que su cita fue un éxito, se muere por saborear sus labios, aun no los ha tocado pero ya sueña con ello.


Desde ese frio 23 de diciembre, ya han pasado exactamente 5 años, Alvaro y Adriana no se hablan más, ambos crecieron indistintamente, hoy lo único que queda son solo recuerdos. Alvaro ya no es lo que Adriana busca. Pero Adriana sigue siendo lo que Alvaro en el fondo de su corazón anhela. Ambos están sentados en una mesa de un café no muy concurrido, fue idea de Alvaro el volver a verse, ella con muchas incógnitas esta ahí solo por compromiso, en el fondo ella esta triste y hastiada. Alvaro en el fondo no quiere crecer, no quiere que ninguno crezca quiere que todo sea como antes, quiere volver a estar con la niña que le ha robado el sueño; mas Adriana ya no es esa niña. Ella ya esta cansada de el, pues es inestable, le suelta la mano, y le dice que quizás no vuelvan hoy, quizás volverán en el futuro; solo es un vago consuelo. Alvaro, suelta una incontenible lágrima y lo único que atina a decirle, es que le haga una vaga promesa, que haga lo que haga, que no se case.   Adriana en shock, acepta y le dice que eso no pasara.

Alvaro, abre su billetera, le da los billetes que hay, le pide perdón y sale corriendo pues todo el llanto se le viene encima, desde hace una hora esta que golpea a sus puertas, la gélida lluvia golpea su rostro, cada gota que siente es una promesa rota, en el tiempo, son unos labios traicionados, son unos templos profanados, unas caricias perdidas, un beso olvidado, un amor asfixiado.


PD: Usualmente combino la fantasia con la realidad, trate de lograr una mezcla pero esta entrada realmente paso.